Sobran inviernos para primaveras
los niños cantan los viejos se quejan
y el lirio sonríe a lagos que deshielan,
los manantiales lentamente se despiertan,
Siempre aprovecho un momento para inspirar,
lo hago pensando en las sutiles bellas doncellas
que aun manoseadas siguen puras.
Y el cielo con peces fieros
los ríos llenos de estrellas,
ciudades como las selvas.
Quizá deseo que todo se equipare,
para evitar que vengas las cosas feas,
hablo de sangre y de guerra,
Quiero romper la ignominiosa cadena
que me mantiene ensimismado,
mirando pa´ las estrellas, mirando pa ´fuera
Cuando me murmulla a través de los sueños,
me detengo a escuchar que cuenta.
Te invito a que busques por tus ideas
y verás en ellas lo suficiente
para que este mundo sea una cosa bella.
Juan Campoamor
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